lunes, 28 de diciembre de 2009




ETC



Esta mañana he conocido a Luzmaría y Marta, las editoras de Ediciones Torremozas, y he pasado un rato muy agradable con ellas. El culpable: Senderos sobre el abismo (Nietzsche enajenado), el libro que contiene los relatos ganador y finalistas del XXI Premio Ana María Matute de Narrativa de Mujeres.

Ha venido a mis manos calentito, con el rostro algo enrojecido pero fotogénico y muchas ganas de dejarse oír, como los bebés recién nacidos y justamente en Navidad.
La verdad es que hacía más de nueve meses que lo esperábamos, y mira por dónde ha sido hoy, día de los inocentes, cuando por fin he podido traérmelo a casa y aquí lo tengo, mirándome con ojos pícaros, haciéndome monerías para que lo coja, le haga cosquillas, le rasque la tripita y, seguramente, cuando tenga la guardia baja, colgarme el monigote en la espalda y descubrirme su verdadero yo de Hombre hecho y derecho.

Dos de esos cuentos tienen como escenario una peluquería y, precisamente, ante mi curiosidad (por no decir inquietud), me comentaban Luzmaría y Marta que nada más lejos de la realidad el pensar que, al tratarse de un premio de narrativa escrita por mujeres, dicha ambientación sea el motivo por el que los mismos han resultado elegidos. Ellas reivindican la categoría de narrativa de mujeres, por llamarla de algún modo, dentro de la literatura; una categoría que, dicen, a diferencia de otros países, en España cuando se menciona siempre va acompañada de la connotación y la oblicua sombra de los eternos temas femeninos, idea errónea que las editoras de Torremozas entienden debe desterrarse.

Al margen de categorías literarias o no (que no comparto del todo deban existir), algo probablemente sepan ellas de esto, de la neutralidad o la universalidad o, puestos, el hermafroditismo de la literatura actual escrita por mujeres, ya que llevan más de veinte años publicándola, especialmente poesía, y convocando el Premio Ana María Matute de Narrativa de mujeres. Para ejemplo, valgan quizá estos siete relatos que conforman Senderos sobre el abismo (Nietzsche enajenado), de la colección Ellas También Cuentan (ETC).

Enhorabuena a las autoras y gracias a las editoras por su estupendo trabajo y sobre todo su cercanía.

martes, 22 de diciembre de 2009




MÁSCARAS

El padre tira una moneda al aire. Sale cara, lo que significa que el único disfraz, de angelito este año, lo usará el hermano mayor. El pequeño aunque decepcionado no echa una sola lágrima. La verdad es que le habría encantado llevarlo él. Siempre antes de dormir le desean dulces sueños, con coros de angelitos; pero él apenas sueña y si lo hace no recuerda lo soñado, o sí, pero nunca angelitos, sino payasos sin nariz, títeres ardiendo, mascotas sin hermanos, lápices de punta muy fina.

Y otro año, sin disfraz, el pequeño corre a jugar al parque. Dos niñas de su edad juegan a la comba. Una de ellas, al verlo, suelta de golpe la cuerda y se lo señala a la otra con el dedo.

—Mira ahí —le dice bajito—, el demonio.


Finalista del I Concurso de Microrrelatos Museo de la Palabra y publicado en Más allá de la Medida

lunes, 21 de diciembre de 2009




THE SNOW MAN, de Ted Eshbaugh

Y van dos. Esta noche ha vuelto a nevar en Madrid. Como no hay dos sin tres y mañana además se juega la Lotería, ojalá una tercera nevada nos sirva de amuleto (por aquello de año de nieves, año de bienes) y nos veamos entrando en el 2010 a bordo de un quitanieves, en vez de en el trineo de Papá Noel.

Por si alguien no ha hecho nunca un muñeco de nieve, Ted Eshbaugh os enseña cómo hacerlo en la versión original de The Snow Man, producida por Van Beuren Studios en 1932.

¡¡¡Feliz Nievedad!!!


VIDEO YOUTUBE: http://www.youtube.com/watch?v=VWQU1nP61Ms

martes, 15 de diciembre de 2009




Voces: Margaret Atwood

Pinto la silueta de una princesa, de una normal y corriente, con el busto estilizado de una modelo y cara infantil, como las que hice para Cuentos de hadas favoritos. Antes me indignaban, las historias nunca revelaban las cosas esenciales sobre ellas, como lo que comían o si sus torres y mazmorras tenían cuartos de baño, era como si sus cuerpos fueran puro aire. No era la capacidad de Peter Pan para volar lo que lo hacía parecer increíble a mis ojos, era la falta de un retrete junto a su refugio subterráneo.

Margaret Atwood, Resurgir

martes, 8 de diciembre de 2009




Hacia el oeste (Going West), de MAURICE GEE

Leo en Internet que Maurice Gee es uno de los más importantes escritores neozelandeses vivos, con una carrera literaria de más de medio siglo.

No lo conocía hasta que una amiga me ha hecho llegar su corto por correo electrónico, pero al parecer ha recibido premios prestigiosos tanto en Nueva Zelanda como fuera de ella. Entre otros, fue reconocido en 2003 como Artista Icono por la New Zealand Arts Foundation, y su novela Plumb galardonada en 2004 con el James Tait Black Memorial Prize, el premio más antiguo y prestigioso otorgado en Gran Bretaña a la literatura escrita en lengua inglesa y que también han recibido escritores como E. M. Forster o Graham Greene.

Going west es un corto de animación promovido por el Consejo del Libro de Nueva Zelanda, a partir del texto de Maurice Gee e ilustrado por Andersen M Studio.

lunes, 7 de diciembre de 2009




El silencio de las palabras:
Chus Arellano



Chus Arellano es poeta, lexicógrafo y profesor. Yo le conocí primero en esta última faceta, cuando me apunté a su curso de poesía en el centro cultural de un popular barrio de Madrid. A aquel grupo, en ese momento, solo asistían dos personas. Por experiencia sé que determinados cursos (idiomas, bailes de salón, taichi, batuka... ) venden mejor que otros (poesía, escritura creativa... ), según los barrios en los que se oferten. El caso es que las clases de Chus eran magníficas, de primerísima calidad, y a él no parecía importarle desplazarse hasta una zona que no cogía precisamente de paso a nadie, ni si enseñaba para dos o para veinte. Su entusiasmo era el mismo y su profesionalidad indiscutible.

Poco después asistí a uno de sus recitales-exposiciones-proyecciones, que no sé bien cuál es el término acertado para referirse a un espectáculo en el que se combinan la poesía, la imagen y el sonido. Solo sé que me gustó mucho.

Nadie mejor que él para aproximarnos a su obra, y así lo hacía al presentar su espectáculo poético en el Centro Cultural Blas de Otero de San Sebastián de los Reyes:

Poesía Perlocutiva, por Chus Arellano:

“Partiendo “absolutamente” de la teoría de los actos de habla, este espectáculo poético pretende inmiscuir al público en los vericuetos que sigue la poesía de hoy en día; demostrar que la palabra nos habita antes, después y a pesar de los poetas; aprovechando técnicas heredadas de las vanguardias, de la experimentación o de la poesía popular y tradicional, se propone un espectáculo que pretende desmontar el clásico recital poético; para ello se vale de elementos visuales, de literatura potencial o de la incorporación de nuevas tecnologías; como muestra un botón, léase (o véase) el poema titulado pacifismo:


PIM
PAZ
PUM”



Chus Arellano ha participado en la realización de Clave, Diccionario del Español Urgente (Agencia EFE) y de REDES, Diccionario Combinatorio del Español Actual (dirigido por Ignacio Bosque), y su poesía se ha publicado en diversas antologías.

Os dejo con algunos de sus poemas, donde la palabra disfruta de un doble protagonismo, como herramienta de expresión y como objeto poético. Espero que os gusten.



Caza


Hay un amor al silencio en todas las palabras;

una tendencia a desaparecer lo antes posible;

una pausa entre cada sílaba por la que se quieren

colar; hay algo que ellas saben más que ellas, al-

go de donde vienen y a donde van; pero en si-

lencio, como animales que se saben deseados.



Siesta


Después del luego, la marea -mareo- de todas

las palabras toma su asiento en la mesa redonda

del recuerdo; la memoria recuece en sus altos

hornos la mesa enunciativa y se hacen con ellas

una sábana, en la que se echa a dormir, más o

menos a las cuatro de la tarde.



Eco
post scríptum

¿Como si se pudiese hablar, así como así, de todas

las palabras?

sábado, 5 de diciembre de 2009




Voces: Carlos Castán

Un viaje, además, tiene siempre un reverso, una cara oculta que no por permanecer invisible debe dejarse de tener en cuenta: viajar no sólo es transportar tu presencia a otros parajes, sino crear tu falta en el lugar en que vives, hacer que alguien diga «¿Dónde andará aquella sombra que acostumbraba a errar por estas calles?» o «¿Habrá muerto ya el tipo que solía acodarse en la esquina del final de la barra?», y la construcción de ese hueco, de ese vacío en el aire, supone a veces una aventura mayor, aunque secreta, que las vividas en los días de carretera.

CARLOS CASTÁN, Sólo de lo perdido